¿Cómo se siente la infancia?
Desde la ventana veintena
Desde el situado sentido
Quiero montar el transporte
De la conciencia prematura
Me sabe a las papas coloradas
Me sabe a prevención del azúcar
Si no sabe la pregunta
Se le llama al acudiente
Huele a viejo arrumado
Que debí escuchar más seguido
Huele a tiza marcada
En el asfalto de la vecina
Y a su ventana rota
Que le dio dos poderes:
Oler miedos,
Clausurar juegos
La veo color sepia y azul
El tiempo me congeló los colores
Quizá porque me salía de la margen
Y pintó colorado al padre
Al que solo le vi en su vergüenza
La oí a lo lejos llamarme al colegio
A escuchar el silencio de las 5 de la mañana
A pararle oreja al regaño de la profesora
A hacer de oídos sordos a las palabras necias
Pero fue el tacto la cúspide sensible:
Que me otorgó el beso de cada mañana
Me compadeció por medio de desgracias
Me acarició como el niño que era
Por tantas luchas en la periferia.
Leonardo M.
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